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ES-ADMC-RA00170 · Person · 1935-12-29 -

Nacida en Toná (Barcelona, España) en una familia de 9 hermanos, dedicada a la agricultura. Antonia se marchó a Barcelona siendo muy joven para formarse como Ayudante técnico sanitario (ATS). Estudiando conoció a Cristina Herránz González, una joven procedente de Jaén, y decidió marcharse con ella hacia la huerta de la Bachillera (Sevilla, España) en busca de trabajo, en 1986. Aunque Antonia era ATS, decidió trabajar como pinche de cocina del hospital Virgen Macarena de Sevilla, inspirada por la frase que una señora de etnia gitana le dedicó en un autobús: “sólo la gente grande tiene trabajos buenos, mientras los pobres no”.

Cuando Cristina y Antonia llegaron a La Bachillera decidieron colaborar con la gente del barrio para contribuir en su crecimiento, y se unieron a Benigno, biólogo, a su esposa, médica, y a otras vecinas con ganas de colaborar. Las hijas de algunas de ellas eran maestras con inquietudes sociales, decidiendo así repartir una encuesta por el barrio para que el vecindario expresara sus necesidades, resultando que los temas de mayor preocupación eran la vigilancia del barrio, el graduado escolar y la costura o corte-confección. Tras la valoración de las propuestas, pusieron en marcha la “Escuela de adultos”, con alfabetización, pre-graduado y graduado escolar, además de un taller de bordado para niños y adultas. Las madres que sabían bordar enseñaban a las niñas las técnicas, y más adelante, para incluir a niños, se llevó a cabo un taller de cocina, del que se encargó un compañero de trabajo de Antonia. En dicho taller, niños y niñas preparaban platos y se los llevaban a sus casas para cenar. También se realizaron otros talleres de cerámica, mimbre, medioambiente, manualidades, campamentos de verano, juegos para niños y salidas culturales para mujeres.

Las subvenciones al principio se gestionaban a través de la Asociación de Vecinos Estrella Andaluza, pero se dieron cuenta que debían formar una asociación para gestionar todas las actividades culturales. Así, la Asociación Solidaridad NIJA fue constituida en 1992. Los primeros talleres se hacían en la sede de la Asociación de Vecinos, hasta que pasaron al Colegio Pedro Garfia. Tras el derrumbe de un aula, el colegio cerró y permitieron a NIJA usar las aulas para realizar los talleres, encargándose la misma asociación del mantenimiento del mismo.

Antonia y Cristina confiesan haber tenido mucha suerte con las personas que les han prestado su ayuda. Por ejemplo, una comunidad cristiana del barrio sevillano de los Remedios decidió colaborar en el barrio, enviando a dos maestras, una bióloga y dos arquitectas para que se encargaran de la educación de adultos. Consiguieron preparar y titular a los estudiantes de graduado del barrio. A las actividades acudía población de la Bachillera y de los barrios colindantes, como San Jerónimo. Después de varios años de alfabetización de adultos, y tras la extensión de este tipo de proyectos a todos los barrios, decidieron finalizar con la educación de adultos y centrar sus fuerzas y recursos en la atención a niños y niñas. Niños y jóvenes fueron creciendo, y tras talleres de formación y de conocimiento compartido, materializado en iniciativas como la creación del periódico de la Bachillera, algunos jóvenes realizaron cursos de formación de Animación Sociocultural, que les permitió a muchos de ellos viajar al extranjero, bajo la organización del Distrito Norte, al que pertenece la Bachillera. Se constituyó un grupo de monitores muy cohesionado donde la amistad construida perdura hasta hoy, ya que las experiencias que compartieron como monitores en talleres y campamentos, salidas culturales y juegos, les hizo desarrollar un gran sentimiento de unidad y compromiso con los niños y niñas de su barrio, ofreciéndoles modelos sanos, cercanos a sus realidades, ya que sus educadores eran sus vecinos.

ES-ADMC-RA00163 · Person · 1954-04-03 -

Nació y vivió toda su infancia y juventud en la Huerta de la Teneria, junto a la Bachillera, cerca del Arteferro. Sus amigos estaban en la Bachillera, donde solía jugar y pasar sus ratos libres. En 1977 se casó y se mudó a la calle Membrillo, en la Bachillera. A principios de los setenta, Manuel se organizó con un grupo de jóvenes vecinos de la Bachillera para solicitar a la Asociación Sevillana de la Caridad el terreno donde posteriormente construirían el local de la Asociación de Vecinos Estrella Andaluza. No fue posible ya que carecían de los medios económicos, hasta que a finales de los setenta, cuando Manuel ya vivía dentro del barrio, el mismo grupo de jóvenes, junto con nuevas incorporaciones del vecindario, se organizaron para fundar la Asociación de Vecinos y construir el local.
Como uno de los fundadores de la AA.VV, Manuel contribuyó en el desarrollo de numerosos logros para el barrio: la negociación del cese de los terrenos para el local, la acometida del alcantarillado, la implementación de una red de agua, el asfaltado, el establecimiento de una sede para la votación electoral en el colegio del barrio (anteriormente tenían que ir a votar a San Jerónimo), la construcción de un consultorio médico, etc. La flexibilidad de su situación laboral le permitía disponer de más tiempo para realizar actividades en la AA.VV. También destacan sus relaciones con el Ayuntamiento de Sevilla, al
pertenecer al Consejo de Participación Ciudadana entre los setenta y los ochenta. Él fue también otro de los organizadores primitivos de la Velá.
Manuel trabajó casi toda su vida en Arteferro, el taller dedicado a la reproducción de muebles y artículos de decoración de forja y tallas antiguos situado en la Bachillera. A partir de 1975 los trabajadores de Arteferro se unieron para crear un Comité de Empresa, tras convocar una asamblea donde se eligió un comité de nueve compañeros y a Manuel Noguera Castillo como portavoz. Noguera Castillo fue el portavoz hasta 1989, año en el que la dirección de la empresa desapareció sin pagar los salarios y las pagas extras correspondientes. En 1990, tras muchas negociaciones entre el comité y el accionista principal, se organizaron como cooperativa con 51 trabajadores, siendo Manuel Noguera el encargado de gestionar y negociar los trámites, además de ser elegido como presidente de la cooperativa. Se mantuvo en su puesto hasta 2006, año en el que se consiguió la prejubilación de la mayoría de los trabajadores. En 1984, Manuel se mudó al barrio de La Carrasca, aunque mantuvo las relaciones con la AA.VV hasta 1990, cuando su dedicación a las labores sindicales con motivo de la Expo 92 cubrió la mayor parte de su tiempo.

Person · 1929-12-17

Nació en Vilches (Jaén, España) en una familia de tres hermanos. Se trasladaron a Guadalajara con el comienzo de la Guerra Civil Española. Al volver a su pueblo tras la guerra y encontrarlo todo destruido se marcharon a Linares, Almería. Sus tres hermanos se casaron en Madrid, mientras Cristina se fue a Barcelona, donde estudió Bachiller y continuó formándose como Ayudante Técnico Sanitario (ATS). Fue entonces cuando conoció a Antonia Graus Subirana. Con el tiempo, sus padres enfermaron y se fueron a Madrid, donde también acudió ella para cuidarles. Allí trabajó en un ambulatorio como ATS. Cuando murieron sus padres decidió volver a Andalucía, contactó con Antonia y ambas viajaron hasta la Bachillera en 1986.
Cuando Cristina y Antonia llegaron a la Bachillera decidieron colaborar con la gente del barrio para contribuir en su crecimiento, y se unieron a Benigno, biólogo, a su esposa, médica, y a otras vecinas con ganas de colaborar. Las hijas de algunas de ellas eran maestras con inquietudes sociales, decidiendo así repartir una encuesta por el barrio para que el vecindario expresara sus necesidades, resultando que los temas de mayor preocupación eran la vigilancia del barrio, el graduado escolar y la costura o corte-confección. Tras la valoración de las propuestas, pusieron en marcha la “Escuela de adultos”, con alfabetización, pre-graduado y graduado escolar, además de un taller de bordado para niños y adultas. Las madres que sabían bordar enseñaban a las niñas las técnicas, y más adelante, para incluir a niños, se llevó a cabo un taller de cocina, del que se encargó un compañero de trabajo de Antonia. En dicho taller, niños y niñas preparaban platos y se los llevaban a sus casas para cenar. También se realizaron otros talleres de cerámica, mimbre, medioambiente, manualidades, campamentos de verano, juegos para niños y salidas culturales para mujeres.
Las subvenciones al principio se gestionaban a través de la asociación de vecinos, pero se dieron cuenta que debían formar una asociación para gestionar todas las actividades culturales. Así, la Asociación Solidaridad NIJA fue constituida en 1992. Los primeros talleres se hacían en la sede de la Asociación de Vecinos, hasta que pasaron al Colegio Pedro Garfia. Tras el derrumbe de un aula, el colegio cerró y permitieron a NIJA usar las aulas para realizar los talleres, encargándose la misma asociación del mantenimiento del mismo.
Antonia y Cristina confiesan haber tenido mucha suerte con las personas que les han prestado su ayuda. Por ejemplo, una comunidad cristiana del barrio sevillano de los Remedios decidió colaborar en el barrio, enviando a dos maestras, una bióloga y dos arquitectas para que se encargaran de la educación de adultos. Consiguieron preparar y titular a los estudiantes de graduado del barrio. A las actividades acudía población de la Bachillera y de los barrios colindantes, como San Jerónimo. Después de varios años de alfabetización de adultos, y tras la extensión de este tipo de proyectos a todos los barrios, decidieron finalizar con la educación de adultos y centrar sus fuerzas y recursos en la atención a niños y niñas. Niños y jóvenes fueron creciendo, y tras talleres de formación y de conocimiento compartido, materializado en iniciativas como la creación del periódico de la Bachillera, algunos jóvenes realizaron cursos de formación de Animación Sociocultural, que les permitió a muchos de ellos viajar al extranjero, bajo la organización del Distrito Norte, al que pertenece la Bachillera. Se constituyó un grupo de monitores muy cohesionado donde la amistad construida perdura hasta hoy, ya que las experiencias que compartieron como monitores en talleres y campamentos, salidas culturales y juegos, les hizo desarrollar un gran sentimiento de unidad y compromiso con los niños y niñas de su barrio, ofreciéndoles modelos sanos, cercanos a sus realidades, ya que sus educadores eran sus vecinos.

Riado Palma, Rosa (1967-)
ES-ADMC-RA00165 · Person · 1967-10-08 -

Nacida en La Bachillera. Siendo muy joven comenzó a ayudar a su madre y sus hermanas en el negocio familiar, el Bar Taxista, donde continúa trabajando como camarera a día de hoy. Reconocida por ser la hija de Encarni Palma, dueña del bar Taxista y una de las primeras vecinas del barrio, Rosa ha estado siempre tan implicada en las festividades de la Bachillera. Fue junto con su hermana Mari Carmen, una de las fundadoras del grupo de Majorettes del barrio de la Bachillera.

ES-ADMC-RA00137 · Person · 1961-08-15 -

Ignacio Cruz pertenece a una de las primeras familias del barrio de La Bachillera, la familia Cruz. Siempre ha estado vinculado a la vida social del vecindario, siendo en la actualidad y desde 2018 el Presidente de la Asociación de Vecinos Estrella Andaluza. Es también vocal del Distrito Norte de Sevilla.